agosto 26, 2023
Cuando Frank conoció a Carlitos
agosto 24, 2023
¡Feliz día, lectoras y lectores!
Hoy, 24 de agosto, se conmemora en Argentina nuestro día por el natalicio de Jorge Luis Borges.
Para celebrarlo leyendo, les compartimos un poema precioso:
De cuando lo que sería sonido todavía era líquido amniótico.
De cuando el aire a través de unas cuerdas vocales te nombraba.
Había una vez y aún no lo sabías.
Un tambor expandido volcaba en tu futura interioridad
lo que guardaba dentro. Fue antes, tanto antes.
Ningún vestigio queda. Nadie en Babel hablaba así.
Nadie de entre los agolpados en el Pentecostés
escuchó de esa lengua toda hecha de inicio, toda rota.
Y allí estabas como la criatura que eras, aguardando.
Ya llegaría el tiempo,
ya saldrías un día a recoger palabras como lirios del campo,
como ojos de tormenta,
animales feroces, una epopeya acorde
a lo que pudiera suceder.»
Raquel Jaduszliwer
Que nunca perdamos el hábito maravilloso de la lectura.
agosto 17, 2023
Qué leer cuando no tenés tiempo
A
veces estamos tan tapados de obligaciones que ni siquiera podemos dedicarnos un
rato para nosotros. Ocuparnos de la casa, los chicos, el trabajo, la facultad,
la familia, nos consume tiempo y energía; llega la noche y lo único que
queremos es acostarnos a leer un rato, pero estamos tan cansados que se nos
cierran los ojos y la novela no avanza.
¡No
sufras más! Para esos momentos en que necesitás desconectarte de todo y
sumergirte en alguna historia que no sea un choclazo ni tenga tramas
complicadas que sea difícil seguirles el hilo, hoy te traigo cinco libros
cortitos (más una yapita) para leer de una sentada (o dos), que te van a hacer
pasar un buen momento antes de volver a la rutina. Quedate porque hay para
todos los gustos.
Si te gustan las historias tiernas que te dejan el corazón calentito, entonces este Zambra del amor es para vos. En La vida privada de los árboles, Alejandro Zambra nos cuenta la historia de Julián, escritor y profesor de literatura, que mientras espera a que Verónica, su esposa, regrese de su clase de arte, le va leyendo a Daniela, hija de Verónica, sobre la vida privada de los árboles, mientras va reflexionando sobre su vida pasada e imaginando un futuro para la niña. Editado por Anagrama, son 117 páginas que se leen en un suspiro. Zambra no falla nunca.
Algo más liviano, pero con una profunda crítica social es El baile, de Irène Némirovsky. Conocemos a la familia Kampf, nuevos ricos de la sociedad parisina, que para poder ser reconocidos y aceptados en el círculo de la alta alcurnia deciden hacer un baile, una fiesta, con mucho lujo, músicos y doscientos invitados. Su hija adolescente observa todos los movimientos de sus padres con respecto a la organización de este evento. Lo encontrás editado por Salamandra y les garantizo 96 páginas de entretenimiento.
¿Preferís algo de misterio? Tengo. Los vecinos mueren en las novelas, de Sergio Aguirre. Un escritor se muda al campo. Tiene por costumbre saludar a sus vecinos cuando llega a un lugar nuevo y eso es lo que hace. Se encuentra con una vecina muy particular y se va a generar entre ellos una atmósfera, cómo decirlo, un poco rara. Una historia muy ágil de leer, con giros argumentales inesperados y un final que te va a dejar con la boca abierta. Son 140 páginas que no vas a poder soltar, del Grupo Editorial Norma.
Si sos de leer más ficción histórica, Teoría general del olvido es para vos. José Eduardo Agualusa nos cuenta la historia de Ludovica, una mujer que decide tapiar la puerta del departamento donde vive y quedarse encerrada. Va a vivir dentro de esos muros por casi treinta años. Afuera, mientras tanto, Angola pelea por su libertad. Si bien tiene 194 páginas (el libro más largo que traigo hoy), esta historia basada en hechos reales se lee muy rápido. La editó Edhasa.
Por último, si sos de escribir diarios o te gusta leer las notas íntimas que escriben los demás, Las palabras justas de Milena Busquets es para vos. Son los apuntes que la autora hace de su vida, sus relaciones, sus pensamientos, su familia. Para los que nos gusta escribir, tiene varios apuntes sobre su proceso de escritura. 136 páginas para leer y subrayar. La editorial es Anagrama.
Si te gustó esta entrada, te invito a que te unas a Mi librero blanco para que sigamos charlando sobre libros, que tanto nos gustan. Me encontrás en el blog y en Instagram.
Romina Gil (un pie en cada taller)
agosto 10, 2023
Un autorretrato especial - Parte III
Soy
Soy mi libro más amado, soy lo que escribo y lo que quedó en blanco. Las piedras que junté y las que llevo en la espalda. Los huecos, los nudos, los desiertos. Lo que escribo en lápiz, porque lo puedo borrar, aunque nunca borro lo que escribo en lápiz. Mi música vieja. Mi música muy vieja. Lo que me trajo el mar. El mar siempre. El mar que me trajo.
Soy las mujeres que me abrieron su corazón y me ayudaron a entender el mío. Soy lo que hicimos juntas desde que andamos juntas.
Soy el amor de mis hijos. Soy todo el amor que tengo. Soy todo el amor que doy.
Soy mis queridos que nunca se van.
Soy mis plantas y las ramitas que junto, las semillas y las hojas.
Soy mis sueños y mis pesadillas.
Soy para siempre mi infancia. Una nena que no sabe bien a dónde ir, pero va.
Jazmín
Autorretrato
lo que me gusta
lo que me hace feliz
lo que amo
lo que disfruto
lo que heredé
lo que quiero legar
lo que hago
lo que quiero hacer siempre
lo que descubrí hace poco
lo que descubrí hace mucho
lo que quiero abrazar todo el tiempo
lo que me voy a llevar cuando me toque ser luz.
Cintia
Es difícil poner en una foto, todo lo que forma parte de mi vida. Intente elegir algunas cosas que representen mi presente y así poder contarles un poco quien soy.
Empiezo con la foto de la foto. Esos dos atraviesan todo el resto de lo que les pueda contar. Son los que sostiene mis malos días y los que les dan sentido a los otros.
El celular también forma parte de retrato. Me paso varias horas contactándome con mi gente… aunque me gusta más compartir momentos en vivo. Amo hablar.
Las llaves simbolizan como esta armada mi rutina, básicamente cuando me falta el auto no se organizarme.
La imagen de la Cruz Roja es por mi elección de ser voluntaria y hacer, dentro de lo posible, algunas cositas que me llenan.
El mate y el termo están donde estoy. Trabajo, partidos, viajes, charlas… siempre mate.
Mi cuaderno… otra de las cosas que me llenan el alma. Escribir y hacerlo rodeada de gente linda fue un gran hallazgo.
Mi golosina preferida. Y la notebook, que ocupa varias horas de mis días mientras trabajo.
El resto es decorativo, pero muestra mi debilidad por las cosas que forman parte de mi hogar y que me hacen sentir bien cuando las veo.
Bueno… esta soy yo. Seguramente falten muchas cosas… pero quizás algunas todavía no las descubrí.
Ariadna
En el rincón de mi escritorio,
reposa la computadora
Sus teclas acaricio con dulzura y pasión,
mientras la musa despierta mi inspiración.
A su lado, el café, mi fiel compañero,
sus vapores embriagan mi ser escritor.
En una taza humeante se funde en la literatura,
y brotan versos que llenan la hoja en blanco.
El ying y el yang muestra que puede
haber un equilibrio entre la musa inspiradora
y el ser creativo de todos los días que se
arremanga para trabajar y pulir mi literatura.
Observando los objetos que se exponen, muestran al desnudo la parte que se quiere ocultar, en este caso cada cosa es un exponente de vida, las plantas el oxígeno, el aire puro, la belleza de sus colores, que alegran y sedan a las personas, distraen nuestras mentes, es tan mágica la naturaleza, que apena día a día que no se la valore.
La creatividad en el arte del buen gusto en una prenda, la libertad que se siente en cada creación. Es maravilloso el arte de la costura, se la desvaloriza bastante, porque requiere tiempo, buenas telas, buenos hilos, en otras palabras, es cara.
Los perros o gatos dan la felicidad que uno pierde en el trajín del día, te reciben con un amor incondicional, no les importa si estás sucio mojado o triste, para ellos sos único, y te dan más de lo que deberían dar, porque son seres inocentes, y la especie humana esconde bastante maldad.
Los libros, ese espacio donde uno puede ser el protagonista y soñar ser diferente con cada obra desde un criminal, o un ser de luz.
El demostrar cómo es la persona, a través de lo que expone sus sentimientos, esa parte íntima, la fragilidad de su interior o mostrar una coraza para no sentirse dañada, el observar nos muestra tal cual somos.
Sencillos, un poco tímidos, o mostrando eso que el otro quiere ver de vos.
Así escueta con mucho amor y comprensión, y haber aprendido a escuchar, soy yo con un gran amor por la vida, por los animales, por la naturaleza. Pero según dicen que cuando se está tanto para el otro uno también pide a gritos comprensión y amor.
Hurgo entre mis cosas.
De pronto, me reflejo
en objetos.
Los acomodo y
saco una foto.
Y aunque una vida
no entra en un rectángulo,
resultó ser
mi espejo.
Lima, alicate, formón, bisturí,
mis herramientas favoritas.
Señaladores que ruego
nunca se terminen.
Resaltadores y biromes
de colores
que ayudan a mi
memoria,
clásicos, modernos,
pasteles, flúo.
Abrochadorita
para los apuntes impresos,
me hacen sentir
que me quedé
en el siglo pasado.
Café espumoso
con leche
para el desayuno
y para acompañar
noches de estudio.
Un mate
para la merienda,
siempre amargo
y compartido.
Computadora portátil
testigo de mis
aciertos y errores.
Mouse con luces
que cambian de color
para no aburrirme.
Auriculares que
se cargan solitariamente
en su cajita
luego de haber escuchado
playlists en portugués,
español y muy poco en inglés.
Música aleatoria.
Anteojos para leer
me recuerdan
las cuatro décadas.
Celular, calendario,
fechas, turnos, recordatorios.
Todo cronometrado.
Dos seres retratados
que tienen
en sus caritas
todo y nada de mí.
Y una paleta de colores
para que elijan.
Pero no desesperen,
lo permanente
solo dura quince días.
Mariana
Siento que soy miles de Marianas en una sola. La niña, la adolescente, la mujer de hoy. De la niña, conservo la muñeca vendedora de empanadas (Ya sin su vestidito y pañuelito a lunares rojos y blancos), que me regaló la tía de mi papá. Mi foto a los dos años, dónde aparezco con los ojos llorosos ya que quería ir a jugar con la vecina. La foto a los veinte años cuando me recibí de la secundaria y siendo abanderada (Una gran sorpresa y satisfacción para mí). Una foto de adulta con mi ángel guardián, mi papá Jorge. La cartuchera y la carpeta del profesorado que, al verme, parecen decirme: “No te rindas que te falta menos que antes”. Mi pasión, el teatro, reflejados en el colgante con dije de las máscaras del teatro y en mi pulserita que dice “Teatro ❤️”. El cuaderno del taller literario donde semana a semana, vuelco mis ideas. La cámara digital con la que capto bellos momentos vividos y mis auriculares Bluetooth que, sin ellos, no soy nada y mis viajes serían muy aburridos sin escuchar buena música. Todos estos objetos, son tesoros para mí, ya que forman parte de mi historia de vida y me muestran quien fui y quién soy hoy…
Trilogía: Pluma, aire, belleza…
Comienzo con los marrones, ocres, beige, luces y sombras.
Descubrí que hay un mundo más allá de los ocres y quise conocerlo. Conocí entonces mi alma nómade, la que supo conseguir un pasaporte y una visa y tomar el riesgo de ir a recorrer el mundo acompañada de sí misma, disfrutando de viajar en avión, tren, subte y colectivo; de caminar; de conocer “monumentos vivos”1 y de los otros; de vivir la cotidianeidad de otras culturas. Quiero extender mis alas y llegar al cielo volando en globo para luego lanzarme en paracaídas y buscar la tierra o el mar…
1Fragmento de “Pilar y Pilara”, en Fotos Escritas, libro inédito (aún) de Towandatehuelche, 1° edición sin fecha, página sin determinar.
Quiero ver la belleza de la vida y plasmarla con mis pinceles, con mis lápices, con mis gubias; trozar mosaicos y destrozar espejos para reflejar en un acto irreflexivo lo que ve mi alma y mi espíritu rebelde; dibujar personas, rostros, seres con luz o sin ella; moldear con barro, cerámica o algún elemento que la naturaleza me ofrezca, a mis antepasados, a mis vidas anteriores, a todos aquellos que ocupan una célula de mi cuerpo en este universo.
Así soy, así quiero ser
Con ustedes… Yo.
agosto 03, 2023
Un autorretrato especial - Parte II
Las chicas de la Luna no se quedaron atrás. Fueron por sus casas recolectando esos pequeños tesoros que las definen, armaron sus autorretratos y los compartieron para que los disfrutemos.
TALLER DE LA LUNA
Nuria
Yo soy
soy todo lo que ves.
soy viajes, aventuras, mundo, paisajes.
soy historia y experiencias
soy movimiento, ejercicio y poder
soy caminata, corridas y paradas
soy música, ritmo y frecuencia.
soy agua fría y caliente.
soy mate, cultura, relaciones y amistades
soy compañía, habla y escucha.
soy comunicaciones, telecomunicaciones
soy redes sociales y consumismo
soy acción
soy hidratación, saludable y fuerte.
soy mi propia estilista y la de mi gente.
soy arte, diseño y festivales.
soy perfumes, fragancias
soy única
soy expresión, diversión y alegría.
soy llanto
soy escritos, pensamientos, ideas y creencias
soy colores y brillos
soy luz
soy vida
soy tortuga de agua, panda en la tierra y águila en el aire
soy fuego, fui cenizas
soy océano
soy verano, primavera y algunas veces otoño, cada vez menos invierno.
soy tierra
soy amor
soy comienzo (aries) y soy fin (piscis)
soy fe, alegría, soy risa
soy inocencia
soy la calma que te llena y que te hace bien.
soy todo lo que se siente.
Espejos
¿qué ves cuando te ves?
en cada espejo que miro, me encuentro.
me veo de diferentes formas
mirarte, mirarse
me miro.
verte cada vez que te miras.
verme
amarte
amarme
te podés encontrar,
te tenés que ver
conocerte, tu cara, tu sonrisa, tu mirada.
refleja lo que sos, lo que querés ser.
refleja lo que no querés ser.
lo que no querés tener
te refleja.
los ojos son el espejo del alma.
verte reflejado en los ojos del otro,
porque miras.
en la mirada de alguien se puede ver y reconocer mucho más de lo que crees.
todo lo bueno que tenés y lo que te falta por aprender.
es el autoconocimiento.
es el reconocerse ante uno mismo.
espejos de la suerte, de belleza
espejos malditos, que te maldicen por 7 años …
espejos que contienen mundos, secretos y verdades
espejos besados, otros golpeados
espejos limpios y sucios
Cuando nos miramos en el espejo, ¿lo hacemos para ver cómo nos ven los demás?
¿o para ver si nos devuelve la imagen que tenemos de nosotros mismos?
A veces lo que más odiamos de los demás, es lo que más odiamos de nosotros mismos.
¿Qué le dirías hoy a tu espejo?
Ceci
Autorretrato
Soy la niña enamorada
Tapada de facturas a pagar
Los viajes que hice
y los que me gustaría
Las alergias de las 4 estaciones
El pañuelito para el cuello por si refresca
Lo que me cuesta levantarme a la mañana
Fuera foco
fuera de encuadre
en varios niveles
orden en el desorden
Todas mis máscaras
las de la superficie y las ocultas
Siempre prevenida con una pastilla para cada dolencia
pero para este nuevo dolor no hay una que ayude
Encontré el remedio de escribir
este cuaderno en blanco que se va llenando
de estas palabras, con colores que intentan curar los grises
Los rituales sin sentido de prender un sahumerio para espantar o para atraer (depende del día)
ciertas energías
lo ojos que miran
los anteojos que permiten ver
o no ser vista
El celular que me conecta
y me desconecta
La libreta de la universidad
que se amarillea
pero sigue esperando completarse
La mariposa
Las flores regaladas y secadas para que no mueran
Los mates interminables que se terminan para una cervecita
Las ganas de volver a natación
La constancia que encontré en Yoga
Los libros que empiezo una y otra vez
La cámara que se esconde y guarda las fotos
que guardan momentos
que guardan historias
Las llaves de mi casa
Mía
Nuestra
La que no elegimos, sino que nos eligió
La tarjeta de acceso al trabajo
que me ayudó a acceder
Mis velitas
Mis aritos
Mis plantitas
Mis collares
Mi música
Acumulo
Los espacios vacíos que dejó
Los que se van a ir completando de cosas mías
cosas nuestras
cosas nuevas
Martha
Una vida
Parece que esto soy yo.
¡Por Dios! Lo miro y lo miro,
y me veo casi fotografiada.
Hasta el pelo azul veo.
(no importa donde, yo lo veo)
Y por suerte, no veo mi panza.
En realidad, la panza salió
Pero la recorté.
No es que la quiero negar,
ni mucho menos.
Sí la quiero cortar,
que desaparezca como ya la desaparecí.
No es parte de mi knolling.
No la registro.
Le hice photocut.
Bueno, no está, pero ya
Le dediqué dos párrafos,
parece que no me puedo despegar de ella.
¿Consejos? Ah sí, las tres P.
Nunca funcionan.
Quizás creas que está desordenado
Pero no, cada cosa está
donde debe estar.
Y no creas que no respeto límites,
estoy construyendo nuevos,
como los terrenos ganados a un río.
Siempre me fascinaron porque
es increíble lo que allí florece.
Casi me olvido de mi base,
remeras de muchos colores.
Así decidí que sería mi vida.
Colorida, flexible y de textura amigable.
Claro que no falta el lado oscuro.
A ese abismo lo conquisto
con la escritura. Con
tres cuadernos que dicen todo de mí.
En el cuaderno rosa acumulo mis escritos,
en el floreado, mis estados contables,
y el pequeño, es mi memoria.
Allí anoto lo que nunca debo olvidar.
El problema es que todavía, está vacío.
Los pañuelitos quedaron bien en el pasado,
ya no lloro más.
Ahora, viajo a California
Y sueño con París.
Colecciono ventiladores y cajas,
Pero me faltaron los imanes, las piedras y los mates.
¡Qué son los souvenirs!
Cargan con miles de recuerdos.
Son un pedacito de aquel lugar
que se alegró con nuestro ser.
Me encanta la sombra que proyecta
la Tour Eiffel. Eso le da vida a mi ser,
y el ventilador, le da sentimiento,
la crema, sensibilidad.
¿Y los garbanzos?, son
mi familia de medio oriente.
Siempre pensamos qué vamos a comer
cuando estemos juntos,
así no hará falta el hablar.
Los marcadores, gomas, sacapuntas
y demás útiles escolares
representan mi pasión, mi vocación.
La educación,
que la vivo creativa y personal.
La educación es dar,
construir, ayudar.
No concibo un mundo
sin solidaridad.
Allí soy Tami, en estilo puro,
allí soy un pez y la escuela es mi mar
Y nunca me quedo sin aire.
¿Y las tijeras?
Son bien reales, porque todavía
tengo mucho para cortar
Y hay una para cada tipo de corte.
El problema es que se desafilan
y a veces, no me dejar cortar.
La pala de jardinera es
mis asuntos pendientes.
Y el celular, es mi vida,
la llave para armar el año que viene.
Es nuestra nueva realidad.
Nuestras miserias y deseos,
nuestra base y creencias,
pasatiempos y esencia.
Es nuestro pueblo chico donde nos conocemos todos,
Y cómo no hablar de la bufanda.
Es mi vida.
Viene de vidas pasadas
y cruza con idas y vueltas,
con remolinos y refuerzos,
con adelantos y retrocesos,
y se pierde en las letras,
bajo los cuadernos y libretas,
Como si el fin de mi vida
aún no estuviera escrito y
como si fuera yo misma
la única podrá escribirlo.
Rita
un día comencé a crear
a girar en el espiral del arte
sin darme cuenta
Sin técnica ni material
a escribir y
la verborragia me dejó con sabor a nada,
a veces la discreción me paralizó,
no siempre los indómitos somos explosivos.
Paso tiempo de silencio,
ergo las palabras salen a borbotones.
luego me dominó el ojo negro
capture paisajes, sonrisas,
los llantos, las miradas
todo eso en una imagen
que grita lo que las palabras
no alcanzan a decir.
Desde que comencé a crear
crecí, practiqué, aprendí (y lo que falta)
en el eterno rulo que gira
donde
Nacer y andar
Pintar y colorear
Andar y dibujar
Retratar y escribir es un modo de sentir
De pensar, de vivir
Y Volver a andar y crear
Hacer bolita una hoja, eliminar una foto,
fondear de nuevo un lienzo
volver a empezar una y otra vez
volver a crear
eso nace de nosotros para un mundo
donde se regocija aquel
que cobija la frescura de la creación
anhela una brisa de espontaneidad
o una simple frase
que le haga cimbrar los huesos.